Piel y fragancia
¿Un cóctel que huele diferente para cada uno?

El sebo cutáneo -la fina capa de grasa que recubre la piel- influye en el modo en que se desarrollan las fragancias. La piel grasa es más capaz de retener las moléculas que componen la fragancia y garantizará un desarrollo más duradero: por ejemplo, las mujeres de pelo oscuro suelen tener una piel más grasa y rica en aceites naturales que las rubias.
La dieta también afecta a la piel. Una dieta baja en grasas reduce la cantidad de sebo en la piel y, por tanto, la duración de la fragancia. Por una vez, comer demasiada Nutella tiene sus ventajas.
Tenga cuidado de no sobrestimar la influencia de su piel en una fragancia. Para estar seguro, basta con aplicar la fragancia sobre una superficie neutra, como un pañuelo de tejido natural, y comparar la evolución de la fragancia con la de tu piel.
Esto es lo que recordamos: Aunque el sebo de la piel influye definitivamente en la longevidad de una fragancia, pulverizarla sobre un pañuelo da una idea del impacto real sobre la piel.